viernes, 4 de octubre de 2013

dani daortiz




Superado el miedo escénico es relativamente fácil subirse a un escenario, interpretar un papel bien ensayado y actuar siguiendo el guión marcado para finalmente oír los aplausos. Allí vimos actuaciones que nos dejaron un recuerdo inolvidable, a grandes músicos, actores, cómicos, monologuistas... y como no, magos. Actuaciones un tanto frías a veces, por ser el público mero espectador y no hacerlo partícipe, y con líneas de tiempo tan marcadas que no dejan margen a la improvisación del artista, que es cuando realmente se retrata.
No, no todos pueden hacer magia de cerca, de calle, rodeado de gente y con barajas prestadas. Vivir en primera persona la maravilla de una realidad que no se llega a comprender, sentirlo en directo para mí es la auténtica magia. 

En este vídeo vemos a Dani Daortiz en estado puro junto a un grupo de chavales aficionados, el asombro de sus caras lo dice todo, cartas al número, viajes y forzajes imposibles o el triunfo en abanico made in de la casa. Una delicia para todos los que adoramos este arte.