Una luz se adentró en el bosque sombrío embrujándolo para siempre. Poco a poco volvieron las hadas y los duendes, la magia y el encanto para nunca abandonarlo. La bruma se hizo hechizo, y el hechizo agua, tierra y luz. Dicen que junto a un joven olivo regado con lágrimas se puede oír una dulce voz que canta al amor y a la vida.
estás
estás
porque nunca te fuiste
en mi recuerdo
en mi corazón
en mi vida
tu sueño
mi destino