viernes, 2 de noviembre de 2012

isabella

Una luz se adentró en el bosque sombrío embrujándolo para siempre. Poco a poco volvieron las hadas y los duendes, la magia y el encanto para nunca abandonarlo. La bruma se hizo hechizo, y el hechizo agua, tierra y luz. Dicen que junto a un joven olivo regado con lágrimas se puede oír una dulce voz que canta al amor y a la vida.

estás
porque nunca te fuiste

en mi recuerdo
en mi corazón
en mi vida

tu sueño



mi destino

6 comentarios:

Eva Letzy dijo...

Me encantan las hadas, los duendes y todos esos personajes fantásticos, que por desgracia no existen en nuestro mundo...
Buen fin de semana, saludos

Valaf dijo...

Yo creo que, texto y vídeo, se salen. Lo bordó usted, maestro.

Mar dijo...

No conocía esta faceta de Mágico. Me has sorprendido muy gratamente. Sí, señor, te has lucido con tu composición. Mi felicitación.

Bss.

mágico dijo...

Mi suegra Isabel falleció la semana pasada, yo le llamaba Isabella imitando el acento italiano. Este pequeño homenaje sé que le llegará de alguna manera.

Gracias por vuestros comments.

mientrasleo dijo...

Qué entrada más hermosa, mágico, lamento el motivo que la provoca, y me reafirmo en que no sólo las cosas bonitas y alegres pueden ser hermosas.
Hoy lo has demostrado.
Besos

mágico dijo...

Gracias, Sil, así es, todo lo bello nos transmite amor.

Besitos