historias del vicent (I)

- Ostiaaaaa, menudo finde!!. Nos fuimos a una casa rural mi novia, una amiga y yo, chaval. Lo vas a flipar!.

- Pero no le decías antes a María que estuviste en Port Aventura??

- Estooo, ya, pero eso fue el viernes, yo te digo el sábado.

- O¿O

- Acabamos reventados después de patear toda la tarde, así que después de cenar nos quedamos viendo la tele, ahí de puta madre con la chimenea encendida. Eso que mi novia decide irse a dormir a la habitación porque estaba cansada y ahí que nos quedamos los dos solos con la manta. Notaba que no dejaba de mirarme pero yo intentaba hacerme el despistado. Y coge y me dice si le puedo traer algo fresco de la nevera, que se muere de calor.

- Vaaa...

- Calla, calla, que a la que voy a salir de la cocina me la veo en la puerta en bragas y sólo me ve me mete mano al paquete.

- O¿O

- Me puso como una moto, la cabrona. Sin decir nada, me bajó los pantalones y empezó a comerme la polla como una posesa.  La levanté de los brazos y se la metí allí mismo, salvajemente, y luego por el culo. No te lo he dicho pero la tía es campeona del mundo de rock acrobático.

- Qué diceeeees??

- Como lo oyes. Imagina la escena en el sofá, la tía encima de mí como un saltimbanqui venga la pirueta y mi picha más loca que loca. Buahhhh... Brutal, tío, Brutal!! Y mi novia roncando, tío, jaaaaa....

- Debió serlo, me imagino. Nada, me alegro por ti. 

Pero si no querías que nadie más se enterase te equivocaste de persona. Soy la vieja´l visillo versión 2.0.

Tiene que ser maravilloso creerte tus propias fantasías.